El pasado viernes día 25 de octubre, miembros de la Asociación Vecinal del barrio Belén mantuvieron una reunión con el concejal de Servicios sociales Rodrigo Nieto García, para exigir
la aplicación de las medidas de atención por parte del CEAS a la población del barrio.

Tras un año de negociaciones se había llegado al compromiso de que una trabajadora del CEAS Belén-Pilarica atendiera a los usuarios en el local que el CEAS tiene en la Plaza de las Nieves, un
día a la semana. La medida habría de entrar en vigor en junio pasado, tras un par de semanas de difusión pública.

La petición venia justificada, principalmente, porque un gran sector de la población del barrio está muy envejecida y tienen grandes problemas para desplazarse, para utilizar los medios
informáticos e incluso el teléfono. Y el resto de la población acaba asumiendo que la acción social es un servicio que no existe en el barrio y termina por no utilizarlo.
Desde hace varias décadas, El CEAS tiene centralizada la atención al público de las dos trabajadoras sociales en las instalaciones del Centro cívico de la Pilarica. Y desde allí atienden a
toda la población de ambos barrios.

El CEAS Belén-Pilarica tiene abiertos unos locales en la Plaza de las Nieves del barrio Belén, en las que, actualmente, se realizan actividades de animación sociocultural, pero anteriormente
estuvo también ubicada la atención al público, por parte de una trabajadora social.

Inopinadamente, este servicio se cerró y pasó a ubicarse en exclusivo en el local de la Pilarica, hasta el cual tienen que desplazarse las personas octogenarias y nonagenarias del barrio y las
personas que deseen hacer alguna gestión o consulta sobre ayudas sociales.

Esta desubicación de servicios, además del problema de desplazamiento, está creando entre la población del barrio una sensación de abandono, discriminación y menosprecio que sería
corregida, en cierto modo, con la opción ya pactada e incumplida por parte de la Concejalía. Las personas del barrio no entendemos la negativa a aplicar una medida que no supone un
incremento de los recursos, ni de trabajadoras sociales, ni de locales, ni de portero, pues ya existen.

Las personas que vivimos en el Barrio Belén no somos ciudadanas de segunda, pagamos nuestros impuestos igual, cumplimos con nuestras obligaciones igual, y por tanto queremos
un trato digno y se nos facilite la atención que merecemos.
Exigimos que, al menos hasta que sea de forma definitiva y tal como se había acordado, un día a la semana se desplace una trabajadora social al CEAS de la Plaza de Las Nieves para
atender las necesidades de los vecinos y vecinas del Barrio Belén.
Para lograr este objetivo no descartamos acudir a las movilizaciones que sean necesarias, dado el poco resultado de la vía dialogada.