Nosotros enseñamos vida, señor (fragmento)

Rafif Ziada

Hoy, mi cuerpo fue una masacre televisada.
Hoy, mi cuerpo fue una masacre televisada que tenía
que caber en audio digital y límites de palabras.
Hoy, mi cuerpo fue masacre televisada que tenía que caber
en audio digital y límites de palabras con suficientes estadísticas como para contrarrestar una respuesta mesurada.
Y yo perfeccioné mi inglés y me aprendí mis resoluciones de la ONU.

Pero aun así, él me preguntó:
“Señorita Ziada, ¿no piensa usted que todo se resolvería si dejaran de enseñar tanto odio a sus hijos?”.
Pausa.
Miro en mi interior.
Busco fortaleza para tener paciencia, pero
no tengo paciencia en la punta de la lengua
mientras caen bombas sobre Gaza.
La paciencia me ha abandonado.
Pausa; sonrisa.
“Nosotros enseñamos vida, señor”.

(Rafif, acuérdate de sonreír). Pausa.
Nosotros enseñamos vida, señor.
Nosotros los palestinos
enseñamos vida después de que ellos
han ocupado los últimos cielos.
Nosotros enseñamos vida después de que ellos
han construido sus asentamientos y muros de apartheid,
más allá de los últimos cielos.
Nosotros enseñamos vida, señor.